Guayaquil
Diagnóstico de las condiciones para emprender. Una mirada desde el ecosistema.
Autores
David Ponce Aguilar (Épico)
Cynthia Cañarte (Épico)
Vicente Buenaño Ramírez (UTEG)
Sedolfo Carrasquero Ferrer (UTEG)
Olga Bravo Acosta (UTEG)
Tabla de contenidos
Resumen ejecutivo
Presentación GEIAL
Breve caracterización general de la ciudad y su ecosistema
A modo de presentación
Aspectos socio-económicos
Dinámica emprendedora
Dinámica institucionalAnálisis del ecosistema de Guayaquil
Marco Conceptual y metodológico
Una mirada panorámica del ecosistema
Haciendo zoom: análisis de las dimensiones
Aspectos favorables
Oportunidades de mejoraConclusiones y orientaciones para el desarrollo del ecosistema
Conclusiones
10 ideas para el desarrollo del ecosistema de Guayaquil
Resumen ejecutivo
Guayaquil es una ciudad ubicada en la costa oeste de Ecuador, en la provincia del Guayas. Esta provincia forma parte de la región litoral del país, y Guayaquil es su ciudad más grande y principal centro económico. La ciudad está situada a orillas del río Guayas, cerca de su desembocadura en el Golfo de Guayaquil, que es parte del Océano Pacífico.
Guayaquil es un importante centro comercial y portuario, debido a su ubicación estratégica junto al océano. La ciudad tiene un papel fundamental en la economía del Ecuador, siendo un punto de conexión para el intercambio de mercancías tanto a nivel nacional como internacional.
En términos económicos y sociales, Guayaquil es conocida por su dinamismo empresarial y comercial. Es un centro industrial y de servicios, con una concentración de empresas en diversos sectores, incluyendo manufactura, banca, transporte y turismo. La ciudad también ha experimentado un crecimiento en la construcción de infraestructuras, lo que ha contribuido a su desarrollo urbano.
Una reciente evaluación del ecosistema de innovación de Guayaquil señala que las capacidades de emprendimiento están mejor posicionadas que en otras ciudades del país, mientras que las capacidades de innovación son débiles, y que tan sólo el 16% de los emprendedores están orientados a la exportación, de acuerdo al análisis realizado por el Programa de Aceleración del Emprendimiento Regional del año 2020, que incorpora los efectos post Covid-19 (MIT REAP Regional Entrepreneurship Acceleration Program, 2020).
La economía de la región del litoral ecuatoriano se basa fundamentalmente en el sector primario, en productos como el banano, pescado enlatado o congelado, y camarón congelado, siendo este el segundo producto no petrolero de mayor exportación del Ecuador desde las provincias del Guayas, El Oro, Manabí, Esmeraldas y Santa Elena (Gonzabay et al., 2021).
Si bien estos productos lideran las exportaciones regionales, también se caracterizan por aportar escaso valor local (ZILE, 2018). En la región destacan tres negocios por su impacto en la economía y sus implicaciones para la cadena de valor: la agricultura, el turismo y la salud, entendiéndose este último como fármacos por prescripción y medicina centrada en el paciente.
Las condiciones para emprender en el ecosistema de Guayaquil alcanzaron valores promedio del índice de condiciones sistémicas para emprender en las ciudades (ICEC). Dentro de los aspectos favorables en la medición destacaron la dinámica emprendedora, como el mejor factor de aporte, sumado a la cultura emprendedora y complementado por el capital social y las redes; además, la presencia de condiciones de gobernanza y articulación del sistema. Asimismo, las iniciativas de innovación abierta y demandas de las empresas de base tecnológica y de los clústeres también muestran ciertos rasgos positivos, pero requierende mayores esfuerzos para convertirse en aspectos favorables. Otras fuentes de oportunidades que muestran calificaciones medias, son la existencia de agendas de investigación y la transferencia tecnológica que, como resultados, da paso a la creación de empresas.
En el plano educativo, la ciudad puede mejorar la formación emprendedora, considerando que cuenta con un activo en la oferta de instituciones formativas, en especial a nivel universitario, lo que se complementa con otros ámbitos de formación emprendedora que hace referencia a la educación no formal, brindada por empresas, centros de capacitación y organizaciones no gubernamentales (ONGs), que tienen alta presencia dentro del ecosistema guayaquileño, lo que permite que en el ecosistema se genere una oportunidad para el trabajo mancomunado entre universidades y estos otros entes de formación, con la formación de un canal de formación de competencias emprendedoras y generación de motivaciones para emprender. Sin embargo, es destacable lo poco que se ha avanzado en la introducción de educación emprendedora en las instituciones de enseñanza media, es decir, colegios e instituciones de enseñanza básica. .
Entre las principales oportunidades de mejora se han identificado las siguientes:
» El acceso al financiamiento, fundamentalmente en lo que respecta a inversionistas privados y empresas locales que decidan invertir en emprendimientos de la ciudad, especialmente en el capital semilla, necesario para los primeros pasos del emprendimiento en rubros entre los $5.000 y $25.000. En este ámbito, es importante mencionar que la contribución del tejido empresarial es insuficiente, considerando que las fuentes privadas de financiamiento son casi inexistentes; así como también, existe poca tendencia de los empresarios a establecer relaciones comerciales con los emprendedores y estrechar vínculos que puedan contribuir con información para la identificación de oportunidades. En cuanto a las fuentes públicas, también muestran un débil comportamiento dentro del ecosistema, por lo que el acceso a financiamiento para crear o escalar empresas es un problema para emprender.
» La atracción de capital, atraer inversores extra-locales y fomentar la formación de inversores locales en conjunto con otras ciudades de la región para desarrollar la oferta de financiamiento.
» El apoyo institucional, principalmente en lo que refiere al número de programas y organizaciones de apoyo al emprendimiento a nivel local trabajando de manera colaborativa.
En respuesta a estas oportunidades de mejora, se pueden plantear algunas líneas orientadoras para la construcción de una agenda de desarrollo accionable:
» Fortalecer los procesos de cooperación entre la academia y el sector productivo del ecosistema de Guayaquil, con el objetivo de generar procesos de innovación abierta que generen resultados tangibles direccionados a la mejora o creación de productos, servicios o procesos en las empresas.
» Generar una mesa de emprendimiento e innovación que fomente la articulación de las instituciones que conforman la triple hélice del ecosistema local.
» Impulsar, junto con los organismos gubernamentales rectores de la política púbica en innovación y emprendimiento, la creación y/o fortalecimiento de iniciativas públicas de acceso a financiamiento para la incubación y aceleración de emprendimientos; así como la creación de incentivos al sector productivo – empresarial, con el fin de promover las fuentes de financiamiento privado.
» Fortalecer una cultura de financiamiento de origen privado, a través de angel investors, capital venture o corporate venture, en el gran empresariado local y nacional, para lograr fuentes de inversión para nuevos emprendimientos, desarrollando además espacios de encuentro entre grandes empresas y emprendedores.
» Estimular la vinculación de emprendimientos en clústeres del sector productivo, con el objetivo de potenciar las iniciativas de innovación abierta que permitan su escalamiento.
» Fortalecer las metodologías de incubación y aceleración de los espacios de innovación, académicos o empresariales, que brinden apoyo a los emprendimientos en sus distintas etapas, esto permitirá reforzar las capacidades de los espacios de innovación del ecosistema para atender las demandas de servicios específicos que nacen de los sectores emergentes (Agrotech, EdTech, Fintech, Foodtech, HealthTech e Insurtech, Biotech, Logistitech), fortaleciendo su presencia en el tejido empresarial.
» Fomentar la formalización de la educación en emprendimiento, a través de la generación de alianzas entre las instituciones de educación superior y otros entes de formación presentes en el ecosistema.
» Desarrollar programas de formación en emprendimiento e innovación para instituciones de educación media, con el objetivo de generar una cultura temprana que favorezca el nacimiento de nuevos negocios innovadores.
» Generar espacios de encuentro entre emprendedores locales e inversores extra-locales para aumentar las posibilidades de crecimiento de nuevas empresas.
» Generar iniciativas para la formulación y/o mejora de las políticas y regulaciones pro emprendimiento, que involucren a todos los actores locales (académicos, empresariales y gubernamentales), con el fin de agilizar los procesos para emprender.